
Hace algunas semanas os mostramos a algunos de los más importantes fotógrafos contemporáneos a nivel internacional. Profesionales que han dado que hablar por su originalidad, creatividad y cuidadoso trabajo. Pero en España la facilidad para el acceso desde muy tierna edad de los jóvenes a cámaras fotográficas de muy distinta índole y a los variados programas informáticos de edición ha obtenido como resultado el despertar de estos aficionados y su consecución como profesionales, ganadores de premios en festivales de fotografía, cuando muchos de ellos no alcanzan la treintena.
Esta semana os damos a conocer a seis de los jóvenes fotógrafos españoles que despuntan a día de hoy por su actividad profesional de forma artística o periodística.

Marcos Rodríguez, el gusto por la soledad
Este salmantino se interesó muy pronto por captar lugares deshabitados, sucios y lúgubres donde cualquier objeto abandonado puede convertirse en protagonista. Juega con el blanco y el negro, las luces y las sombras para acrecentar esa sensación de soledad y de abandono. Bebe del trabajo de Bruce Gilden, miembro de la prestigiosa agencia Magnum y consagrado profesional de la fotografía de calle, y sus retratos urbanos han sido expuestos en diversas salas alternativas de Madrid.
Miguel Candela, el antropológico fotoperiodista
Desde Alicante y con una proyección internacional imparable llega Miguel Candela, que mueve su actividad profesional entre el reportaje documental y el fotoperiodismo, con una mirada antropológica que le lleva a resaltar la fisonomía humana y sus culturas con especial cuidado en el detalle. Ha recogido con su cámara la realidad de los habitantes de países como Mali, Bangladesh o Filipinas con picados y contrapicados que recogen hasta el más mínimo de sus sentimientos, desde el miedo y el vértigo hasta la felicidad y la ilusión. Actualmente reside en Hong Kong, donde ha expuesto y cosechado algunos importantes premios.


Cristina de Middel, fresca excentricidad
Seguimos con otra de las figuras con mayor presencia internacional, también venida desde Alicante (el Levante en estado puro). Se trata de Cristina de Middel, como se la conoce a través de Twitter, la más mayor de este grupo, pero con una trayectoria como fotoperiodista fresca, viva y muy original. Cuenta de ello da su trabajo “Los afronautas”, un proyecto que fascina por su excentricidad y, a la vez, trata de documentar la increíble historia de cómo Zambia lanzó su programa espacial en los años 60. Siempre movida entre la realidad y la ficción, ha ganado premios, ha expuesto en ciudades como París y Londres y el fotolibro que recoge las imágenes de su mencionado proyecto se ha convertido en uno de los más codiciados del año.
Ibai Acevedo, el imaginativo autodidacta
Pero no todos nuestros (incipientes o no) profesionales han emigrado al extranjero para realizar su trabajo fotográfico. Uno de ellos es el barcelonés Ibai Acevedo que lleva poco tiempo interesándose a nivel profesional (y autodidacta) por esta labor, pero ya se le siguen sus pasos de forma ferviente a través de las redes sociales. Le caracterizan imágenes originales, imaginativas, intimistas, cautivadoras, que crean escenas y momentos mágicos que combinan realidad y ficción de forma magistral.

Cristina Otero, la retratista melancólica
La más joven de los fotógrafos contemporáneos que te presentamos es Cristina Otero, de dieciocho años y natural de Pontevedra. Una artista y fotógrafa que se nutre de las redes sociales para despuntar desde los trece por unas imágenes poderosas, con gran fuerza visual y un especial cuidado en el retrato. Juega con la elegancia, la melancolía y un toque oscuro que dota a, en su mayoría, modelos femeninas de un halo de misterio muy atrayente. Se le augura un gran futuro por delante y no es para menos.

Manu Mart, el fotógrafo de la calle
Y de los jóvenes autodidactas pasamos (y finalizamos) con uno que se ha curtido y formado en el Institut d’Estudis Fotogràfics de Catalunya: Manu Mart. Este madrileño que empezó con la publicidad, obtuvo una beca de la escuela EFTI, gracias a la que ha conseguido varios premios por fotografías de calle con un peculiar estilo y calidad. Destacan sus imágenes de escenarios urbanos en las que domina la luz, un logrado juego de contrastes con personajes anónimos de perfiles muy cuidados que también se combinan con la improvisación.
